En esta sección, volvemos con el tema de conocimiento, pero ahora demostraremos las distintas formas de conocimiento que existen dentro de esta, y sus características únicas que las diferencian de las demás.
1. La percepción
La percepción sensorial es el proceso por el cual podemos obtener conocimientos acerca delmundo exterior. Tradicionalmente, se creía que existían cinco sentidos: la vista, el tacto, el
olfato, el gusto y el oído. Sin embargo, hoy en día mucha gente sostiene que hay otros
sentidos, tales como el sentido del calor, de dolor, del movimiento, del equilibrio, los sentidos
del hambre y de la sed, o un sentido de dónde se encuentran las partes de nuestro cuerpo.
En el pasado, la opinión de que los sentidos proporcionan la base de todos nuestros
conocimientos fue cuestionada con la idea de que se necesitan conceptos preexistentes para
que pueda ocurrir cualquier tipo de percepción. De hecho, hoy en día es común entender la
percepción sensorial como un proceso activo de interpretación del mundo de acuerdo con
expectativas, marcos conceptuales y teorías preexistentes.
Por lo tanto, hay un cierto nivel de desacuerdo con respecto a si percibimos directamente el
mundo tal como es, o si la percepción es un proceso activo en el que nosotros mismos
proporcionamos gran parte del contenido de nuestras experiencias.
2. La razón
La razón nos permite ir más allá de la experiencia inmediata de nuestros sentidos. Está
vinculada estrechamente con la lógica, que es la deducción de conclusiones válidas a partir de
premisas o puntos de partida dados. El razonamiento humano también puede ser de
naturaleza inferencial, permitiendo sacar conclusiones que no pueden deducirse estrictamente
a partir de sus premisas. Surge entonces una pregunta interesante sobre si los criterios de
racionalidad y las normas de razonamiento están basados en la cultura. Las áreas del
conocimiento pueden establecer sus propios requisitos con respecto a los tipos de
razonamiento que son aceptables.
El razonamiento inductivo es el proceso de respaldar afirmaciones generales con una serie de
afirmaciones particulares, es decir, lo opuesto al razonamiento deductivo, que tiende a ir de lo
general a lo particular. El razonamiento inductivo es, por su naturaleza, inferencial. Las
afirmaciones que contienen la palabra “todos” no suelen ser demostrables en sentido estricto,
debido a la dificultad de efectuar observaciones en un conjunto infinitito de elementos
particulares. Esto es importante para las ciencias naturales, pero también para las ciencias
humanas, tales como la psicología y la economía.
3. La emoción
La concepción naturalista de las emociones sostiene que son el producto de procesos
naturales, con causas y efectos fisiológicos. Un promotor de esta teoría fue Darwin, quien creía
que las emociones son puramente fisiológicas, y por lo tanto universales y presentes en todas
las culturas. No obstante, pueden citarse muchos ejemplos de emociones que son específicas
de una determinada cultura, por ejemplo, la noción china del “amor triste”. El punto de vista
opuesto es el de los construccionistas sociales, quienes sostienen que las emociones dependen
de la conciencia social, y no poseen ninguna base natural. Por ejemplo, las emociones como la
vergüenza parecen presuponer una noción de lo correcto y lo incorrecto. La emoción ha sido
considerada a veces como una forma de conocimiento poco fiable. Por ejemplo, se ha criticado
a las emociones diciendo que son obstáculos irracionales que obstruyen el conocimiento y
distorsionan nuestra imagen de la realidad. Sin embargo, otros creen que las emociones no
solo nos ayudan a entender las experiencias y los comportamientos sociales y culturales, sino
que también son una fuente de conocimientos sociales, éticos y políticos, ya que nos ayudan a
formar una comprensión del mundo que nos rodea.
4. El lenguaje
“El lenguaje enmarca las coordenadas de nuestra vida. Los seres humanos, desde que
nacemos, somos los animales más indefensos de la naturaleza, pero unas bestias que hablan;
por lo tanto, podemos solicitar ayuda, aprender a pedir perdón o ensayar nuevas y novedosas
formas de declararnos. El lenguaje es un puente de palabras que se establece entre dos
individualidades que sin él estarían mucho más perdidas, mucho más aisladas, mucho más
indefensas. Decía Nietzsche: «El lenguaje es el único punto de unión entre dos seres
eternamente separados». Pero el lenguaje, las palabras, no son sólo la base de la
comunicación humana, sino también del pensamiento. Las ideas no nacen desnudas y después
se visten con determinado concepto. Las ideas, a diferencia de los seres humanos, nacen
vestidas. Son indisociables del lenguaje. Lo cual nos indica que sin el lenguaje no podríamos
pensar. El límite del lenguaje será pues el límite de mi mundo, de mi inteligencia, de mi
pensamiento, como muy bien han planteado numerosos psicólogos contemporáneos y algunos
filósofos, entre los que cabe destacar a Wittgenstein.”
5. La imaginación
La imaginación se define con frecuencia como la capacidad de formar una representación
mental de algo, sin el estímulo de una experiencia sensorial. Tradicionalmente, la imaginación
ha estado asociada con las imágenes y con la construcción de una imagen mental de alguna
cosa. La imaginación se entiende a veces en un sentido más amplio como algo asociado con la
creatividad, la resolución de problemas y la originalidad. En este caso, puede tratarse de
establecer vínculos entre ideas que de otro modo no estarían conectadas, a fin de resolver
problemas. Esto puede ser útil para la elaboración de modelos o la creación de teorías en las
ciencias, y para resolver problemas estructurales en las artes. No obstante, a veces también se
desconfía de la imaginación, en parte porque se la ve como algo derivado en la mente del
individuo, y por lo tanto algo subjetivo. A veces, la imaginación también se asocia con el
razonamiento que lleva imaginar otras realidades, es decir, imaginar “qué ocurriría si…” o “qué
hubiera ocurrido si…”. La imaginación a veces se asocia también con la posibilidad, ya que se
puede argumentar que solo podemos imaginar aquellas cosas que son posibles. De este modo,
hay quienes entienden la imaginación como algo que proporciona pruebas de lo que es o no es
posible. En la vida cotidiana, la imaginación tiene un papel especialmente protagónico en el
entretenimiento, por ejemplo, los programas de televisión o películas de ficción. No obstante,
se puede argumentar que la imaginación también desempeña un papel más profundo, por
ejemplo, en la educación moral, en el desarrollo de la empatía o al proporcionar
oportunidades para la expresión personal y una mejor comprensión de uno mismo.
6. La fe
El término “fe” se utiliza con mayor frecuencia para hacer referencia a una fe religiosa, pero
también puede utilizarse en sentido laico como sinónimo de confianza. Si bien se la asocia en
la mayoría de los casos con una creencia en un Dios o dioses, la fe puede ser religiosa sin ser
teísta, por ejemplo en el caso del budismo. También puede verse como un compromiso con
una determinada interpretación de la experiencia y de la realidad que no es necesariamente
religiosa, tal como el humanismo. Sin embargo, para muchas personas la fe es una manera
clave de intentar comprender y explicar el mundo. Las pruebas en las que se basa la fe suelen
ser controvertidas. Esto es especialmente cierto en el ejemplo de las escrituras: quienes
pertenecen a grupos religiosos suelen considerarlas como pruebas infalibles, mientras que los
que no pertenecen a estos grupos suelen mostrarse más reticentes. Si bien los críticos
sostienen que la fe es irracional e incoherente, otros afirman que debe entenderse como una
manera de ir más allá de la razón, en vez de como algo puramente irracional. De hecho, si bien
se suele contrastar la fe con la razón, muchas religiones las consideran interdependientes; por
ejemplo, la teología natural mantiene que solo es posible acceder a Dios mediante la razón, y
muchas religiones consideran la razón como un don divino. Hay quienes sostienen que las
críticas y la controversia en torno a las pruebas de las afirmaciones de fe están mal encaradas,
ya que la fe es un acto de confianza y es un ejemplo de conocimiento que no se basa en
pruebas. Es más, en algunas tradiciones las creencias que no están basadas en pruebas se
consideran superiores a las que lo están, ya que se considera que necesitar pruebas concretas
representa una falta de fe. Teniendo en cuenta esta controversia, los profesores deben
proporcionar la oportunidad para una discusión crítica de la fe como forma de conocimiento.
Su inclusión en las formas de conocimiento no debe verse como una excusa para aceptar, sin
cuestionarlas, las afirmaciones de conocimiento en la religión o en otras áreas de
conocimiento.
7. La intuición
La intuición se describe a veces como cognición inmediata, o conocimientos que son
inmediatamente evidentes sin una inferencia, prueba o justificación previas. La intuición se
contrasta a menudo con la razón, ya que se considera que es conocer sin utilizar procesos
racionales. Jung, en su famosa obra Psychologische Typen (1921), se refirió a la intuición como
percepción a través del inconsciente, subrayando así la idea de que la intuición suele verse
como creencias que se conocen sin entender cómo se las conoce. La intuición se asocia a veces
con los conceptos de instinto y conocimiento innato. Por ejemplo, algunas personas
argumentan que si bien no tenemos conocimientos innatos de ninguna lengua en particular, sí
tenemos una capacidad intuitiva de usar el lenguaje. La intuición se ha debatido mucho en el
ámbito de la ética, en cuanto a si tenemos intuición moral, o algún tipo de sentido innato de lo
que está bien y lo que está mal. Algunos también consideran que desempeña un papel
importante en los adelantos científicos. Saber algo por intuición es saberlo mediante la
introspección o una comprensión inmediata. De este modo, hay quienes sostienen que es
imposible justificarla, o que no precisa mayor justificación ya que es inmediatamente evidente.
Algunas personas son consideradas más intuitivas que otras, y con frecuencia se dice que las
personas intuitivas toman decisiones instintivas más rápidamente sin ningún justificativo
racional identificable para estas decisiones. Sin embargo, algunos han negado la existencia de
la intuición como una forma independiente de conocimiento. Por ejemplo, se ha sugerido que
la intuición es un término que se utiliza frecuentemente para describir una combinación de
otras formas de conocimiento, tales como la experiencia previa, una percepción sensorial
fuerte y una imaginación activa.
8. Memoria
Muchas discusiones sobre el conocimiento suelen centrarse en cómo se forman las creencias y
el conocimiento, en vez de en cómo los individuos los recuerdan. Sin embargo, la mayoría del
conocimiento que tienen los individuos consiste en la memoria, y por ello la cuestión de cómo
retenemos la información y cómo se reconstruyen las experiencias y acontecimientos pasados
es un aspecto importante de cómo se forma el conocimiento personal. La memoria, y en
particular los hábitos, están vinculados estrechamente con el conocimiento de procedimientos
y con recordar cómo se efectúan las acciones. A diferencia de la percepción, la memoria se
refiere a cosas que no están ocurriendo en el presente instante. Y a diferencia de la
imaginación, la memoria se refiere a cosas que creemos que han ocurrido realmente. Hay
quienes sostienen que la memoria en sí no es una fuente de conocimiento, sino que es en
cambio un proceso que utilizamos para recordar conocimientos adquiridos en el pasado. No
obstante, si bien la memoria se refiere a conocimientos adquiridos en el pasado, se puede
argumentar que incluso los nuevos conocimientos dependen de la memoria, y están influidos
por ella. Por ejemplo, la manera en que interpretamos nuevas situaciones puede estar influida
considerablemente por la experiencia y los acontecimientos previos. De este modo, además de
ser una “unidad de almacenamiento” para el conocimiento existente, la memoria puede ser
también un mecanismo que nos permite procesar situaciones nuevas y únicas. La importancia
de la memoria puede subrayarse al imaginar los desafíos que podrían presentarse si la
perdiésemos. Ya que una parte tan grande de nuestros conocimientos personales tienen la
forma de recuerdos en la memoria, las cuestiones relacionadas con la fiabilidad de la memoria
también son cruciales. Suele considerarse que la recuperación de recuerdos a través de la
memoria no es fiable, por ejemplo, porque se la ve como algo subjetivo o muy afectado por la
emoción. Sin embargo, nos fiamos de la memoria todos los días y, ya que gran parte de
nuestra memoria parece ser fiable, esto nos da la confianza de que otros recuerdos también
son fiables.
Fuentes de investigación:
(MUÑOZ; 2010; 115)
(González del Riego, 2017)
Comentarios
Publicar un comentario